Orfandad – inmoralidad – espiritismo / idolatria
personas victimas de hogares enfermos acaban sufriendo desviós de conducta sexual cayendo hasta el ocultismo. Espiritismo e idolatria traen amarres demoniacos para la vida sentimental de las personas comprometiendo las relaciones. Religiosidad, inmoralidad y violencia andan juntas de la mano.Un manto de espiritismo e idolatria produce orfandad e inmoralidad. La inmoralidad lleva al espiritismo y el espiritismo lleva a la inmoralidad. Y todo esto es hecho a través del dinero y por el dinero. La idolatria torna a las personas insensibles al verdadero Dios.
Sentimiento de orfandad: el manto de moloc
la tarea de Moloc es matar los hijos y destruir la paternidad disceminando un sentimiento entrañable de orfandad y rechazo. Uno de los problemas espírituales más grandes del mundo es la alianza de sangre derramada violentamente perpetuada con el espíritu de muerte: el culto a Moloc (hijos muertos en sacrificio “aborto”). El mayor altar a Moloc “dios muerte” son los vientres de las madres que abortan.
Ahora cuando la relación de hijo y padre se rompe afecta directamente la relación con Dios. Dios quiere una relación de padre con nosotros. Por eso los hijos no deben quebrar su relación con su padres. Dios nos quiere enseñar a ser padres. Y esa relación con los padres establece la base para la revelación de Dios como Padre.Orfandad produce aislamiento y segregación. Soledad, independencia y fama viene del aislamiento. El objetivo final de Jesús, sin embargo, es llevarnos al Padre. (Juan 14:6-8) Permitamos a Jesús conducirnos a una revelación de Dios como Padre.
El verdadero tabernaculo
La figura paterna esta ligada a la verdadera adoración. El lugar de la verdadera adoración fue alegorizado por el lugar santisimo en el tabernaculo.
El tabernaculo tenia 3 puertas llamadas “camino” “verdad” “vida” de ello Jesús profeticamente dijo “Yo soy el camino, la verdad y la vida” es Jesús quien nos conduce al Padre, es Jesús quien rasgo el velo del lugar santisimo para representar que a través de él tenemos acceso a la revelación y presencia del Padre.
Rompiendo los velos en dirección a la verdadera adoración
La primera puerta (camino) nos habla del perdón de los pecados. El arrepentimiento es la indicación que vamos en el camino adecuado. Existe sin embargo una distancia espíritual entre el camino y la verdad. Usted puede estar en el camino y no en la verdad. Muchas cosas aun no son entendidas y discernidas. Para romper el velo de la verdad es necesario una vida responsable de meditación en la Palabra y la luz del Espiritu Santo. Somos transformados por la renovación de la mente. También existe una distancia entre la verdad y la vida. El lugar santisimo es el lugar de entrega total y vida total. En el lugar santisimo vemos a Dios. Este acceso a la paternidad de Dios se basa en un corazón reconciliado y convertido a los padres. Cuando abrimos nuestro corazón a nuestros padres, nuestros ojos se abren a Dios y a otras personas. Soló podemos ver la gloria de Dios a través de un corazón reconciliado con los padres. De eso fluye una adoración en espíritu y en verdad y en una vida ministerial fructífera. La revelación del Padre nos introduce al nivel de la adoración.